domingo, 22 de septiembre de 2013

Para mencionar esta entrada, debo hacer un halago a una famosa frase de la película Blade Runner: "Yo he visto cosas que vosotros no creeríais..."

He visto hombres que han llorado cuanto tú creías que eran insensibles. Mujeres aferradas a amores a tan larga distancia que cada minuto que pasan sin él, es una cuenta atrás para su propia locura.

He recorrido por senderos llenos de luz en la vida, creencias de divinidades y creencias de espiritualidades, de poderes más allá de la comprensión y tramas que se escapan de cualquier intelecto. También he recorrido senderos oscuros, donde la droga, la corrupción, la perversión y el odio marcan tan adentro, que siempre piensas que a ti no te ha afectado y luego ves actos en los que desgraciadamente, te conquistó.

He buscado luces. Sí, luces. Chispas de humanidad, chispas de fé en uno mismo, chispas de humildad... mis logros han sido encontrar gente tan humilde que ni te imaginabas que podrían llegar a ser gente popularmente reconocida y que lo halagan como a un dios. He visto como un amigo ha socorrido a otro, sin preguntarse cuando ni por qué, como ni hacia donde... solo sabiendo que se le necesitaba, responder a la llamada de alguien cercano.

He visto traiciones. Tan y tan destructivas, como para intentar suicidarse, para despreciarse uno mismo como persona, cometer tal actos de locura de auto-dañarse o querer apuñalar a otros. He visto los efectos de la demencia, de la violencia, de la prepotencia...

He visto nacer. Hay quienes lo llaman renacer. Pero creo que era una semilla enterrada dentro que no había nacido aún. He visto como personas se han auto-superado. Como la obesidad ha pasado a ser un problema en el olvido, como la pereza ha quedado en un interrogante en sus vidas y hasta he visto el valor de un cobarde volverse rebelde en el momento en el que un ser querido había sido dañado.

He encontrado amores. Pero no amores de los que dar un beso significa cuanto aman, si no amores de los que la vida ha dependido de ello. He visto como un abrazo ha significado más que un te quiero. He visto miradas que derriten cualquier iceberg. Amores tan y tan profundos, que parecen de hadas, de cuentos de niños...pero reales.

He visto maldades... he visto bondades.  Lo malo siempre se ve. En las noticias, en comentarios, en vídeos... y lo bueno queda en un segundo plano, como algo inexistente. Yo creo que sí hay fé en la humanidad, que dentro de nosotros tenemos la chispa de luz que debemos hacer brillar.

Hay tanta maldad hay fuera, que es difícil encontrar esas pequeñas chispas entre tanta multitud. Las hay... os aseguro que las hay.

Lo importante realmente de esto es que no he visto cosas que vosotros no vierais, si no que lo habéis visto y a lo mejor no le habéis dado la importancia que realmente tiene. A lo mejor, deberíamos saber que esa persona esta haciendo algo mejor, algo fuera de lo común, algo que no entra en lo establecido por la vida...

La cuestión no es ver las cosas, no es hacerlas... ni siquiera sentirlas.

La verdadera incógnita a todo esto es...

¿Creemos?